Esta afirmación del título es cada vez menos osada; es simplemente una comprobación de la realidad. Para hacerlo parto de mi situación personal: cada día que pasa veo menos TV (salvo partidos de fútbol en vivo) y aumento la cantidad de fuentes desde las cuales adquiero información.
La razón es que estoy leyendo blogs y, gracias a eso, consiguiendo información que de otra forma no tendría. Usando lectores RSS, que Darío Gallo describe como las “herramientas imprescindibles para el periodista de hoy”, leo poco más de 100 blogs (sólo un pequeño porcentaje publica diariamente) y con ello accedo a la “crème de la crème” de los temas que me interesan.
Gracias a eso, he seguido con entusiasmo lo que se ha publicado sobre el tema de Microsoft-Economía, Agenda Digital y cosas novedosas, como que ya se sabe quién escribía el “falso diario” de Steve Jobs. En los medios tradicionales, les aseguro, que todo eso no ha calificado como noticia.
Y, para probar el buen nivel y seriedad que van adquiriendo ciertos blogs, además de la pertinencia de leerlos, quiero citar el caso de Luis Ramírez, quien comentó ayer en su blog acerca de la columna del Dr. Carlos Osorio publicada por la revista Qué Pasa el fin de semana.
Como se puede apreciar, hace un análisis bien detallado de dicha columna, pero lo que definitivamente hace que todo cambie y nos sitúe frente a un medio distinto, es que el propio Dr. Osorio, autor de la columna, publica un comentario para pedir disculpas explicando que “desgraciadamente, escribí la columna desde un estado personal de molestia y rabia con una práctica cada vez más frecuente en nuestra política Chilena”.
Ante esto, tres cosas:
- Si no leyéramos blogs, no nos habríamos enterado ni de la columna y menos, de esta parte de los hechos.
- La revista se perdió esta interacción entre usuarios y columnista por no ofrecer dicha interacción.
- Los blogs y los bloggers son fuentes de noticias… ya no se los puede ignorar como gente que publica cualquier cosa.
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