Me gusta cuando empresas importantes ponen el acento en la usabilidad y justifican a través de ella los buenos resultados que obtienen.
La reflexión nace a propósito de lo hecho por Google hace algunos días, en el sentido de “agrandar” el espacio en el que se ingresan los términos de búsqueda y los botones para activarla. La tesis explicada por sus diseñadores es de esa manera se da mayor importancia a esta tarea y por lo tanto, se facilita el uso. Además explican que su página inicial tiene una historia de cambios que tiene en común la búsqueda de hacer que el usuario se sienta más cómodo en su trabajo.
La imagen muestra abajo la nueva caja de búsqueda comparada con la anterior; las líneas grises permiten comparar los tamaños relativos de la zona de búsqueda y los botones.
Creo que para entender a este cambio, hay que tener en cuenta otro dato que se actualiza con poca frecuencia, referido al número de palabras que las personas escriben cuando usan un buscador. Es claro que mientras más palabras usan, más exactos serán los resultados. Sin embargo, una de las pocas estadísticas públicas que existen revela que dicho número estaba disminuyendo en 2008 (ver imagen a continuación).
Las barras en rojo muestran cómo se buscaba en 2008 y las verdes representan 2007; se puede apreciar una tendencia hacia el uso de menos palabras.
De allí que la solución vía un diseño más usable que puso en marcha Google, revela que hay interés en revertir dichos números. El tiempo dirá si los resultados acompañan la decisión, aunque el sentido común (el arma secreta de los sitios usables) indica que si hay más espacio disponible, efectivamente se producirán búsquedas con más palabras. Y, gracias a eso, Google seguirá aumentando su prestigio de ser el más certero a la hora de encontrar.
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